miércoles, junio 14, 2006

La declaración de la semana (Guantánamo)



Continuando con Guantánamo, me encuentro en el periódico de hoy con la declaración de la semana, qué digo de la semana, debería ser del año, o aun del milenio. El comandante del campo (de concentración y exterminio) de Guantánamo, Alte. Harry Harris, declaró que: “los suicidios no fueron actos de desesperación, sino un acto de guerra contra Washington”. Sí, leyeron bien, y si no dan crédito a esto, revisen cualquier edición de fecha de hoy de algún periódico que trate el tema. Ya no sólo resulta irrisorio, sino terriblemente descarado. Esta declaración responde al pedido del Comité de la ONU contra la Tortura (¿Qué haríamos sin la legión de justicieros de la ONU, que supera a Superman, Batman, Robin y todos los superhéroes juntos?). O sea que los dos sauditas y el yemení se suicidaron, según Harry Harris (“Jarrito” para sus allegados, no se sabe si por su afición al jarro, como queda demostrado en su declaración, o por el tamaño de su cerebro), no por un acto de desesperación de un encierro indefinido, sino para derribar la capital del imperio mayor. Vaya con estos hombres, ¡qué ocurrencia tan nefasta!
Pero como de todo hay que sacar una enseñanza, ni se le vaya a ocurrir a Ud. tener problemas con alguien, no vaya a ser que esta persona se suicide para hacerle la vida imposible por el resto de su existencia, y tampoco se le ocurra a Ud. de que alguien le deba algo, tal vez tenga Ud. que suicidarse para estropearle a su deudor las ganas de volver a deber. Y no nos asombremos si en la final del Mundial de fútbol, el equipo que pierda comete un suicidio masivo para arruinarle los festejos a su rival.
Cuándo va a crear la ONU un Comité contra los Disparates y la Hipocresía. Bueno, nunca, ya se sabe que no hay que escupir al cielo, porque el escupitajo nos cae en la cara. En el caso que hoy nos ocupa, “Jarrito” es sólo el botón de muestra de la pandilla de dementes e hipócritas que secundan al genocida mayor del planeta, es decir, Bush. Esta historia de “Jarrito” podría llegar a constituir la “cronicómica” de hoy, si no fuera porque estos personajes, que envidiarían las más horrendas películas de terror, son los que gobiernan los destinos del mundo de hoy en el que nos tocó vivir.

P.D.1: A continuación les transcribo una nota de la revista Mother Jones, que me comprueba que yo no estoy loco, y que el loco es otro (acompaño con la traduución)

Guantanamo has driven Rear Admiral Harry Harris insane
The Bush administration's war on terror has claimed another victim--namely, the tenuous grip on reality possessed by Rear Adm. Harry B. Harris Jr., the commander of the Guantánamo Bay detention camp. Commenting on the suicides of three detainees, Harris offered this analysis:
"They are smart, they are creative, they are committed," Admiral Harris said. "They have no regard for life, neither ours nor their own. I believe this was not an act of desperation, but an act of asymmetrical warfare waged against us."
I don't think this requires any further comment.

[Guantámano ha vuelto loco al Almirante Harry Harris

La guerra de la administración Bush sobre el terror ha cobrado otra víctima -precisamente , el tenue asidero con la realidad presentado por el Alte. Harry Harris Jr., el comandante del campo de detención de la bahía de Guantánamo. Al comentar sobre los suicidios de tres detenidos. Harris ofreció este análisis: "Son inteligentes, creativos, son comprometidos", dijo el Almirante Harris. "No tienen respeto por la vida, ni la nuestra ni las suyas propias. Creo que esto no fue un acto de desesperación, sino un asimétrico acto de guerra en contra nuestra" No creo que esto requiera ningún comentario adicional.

P.D. 2: Adjunto también una fotografía de Harris ("Jarrito" ya para nosotros), no sea cosa que se lo cruce Ud. por la calle y se le ocurra suicidarse para hacerle la guerra a este "señor".

Imágenes de Guantánamo y vuelos hasta allí

El tratamiento "humanitario"




La "sala de entrevistas"



Derechos "humanos"


El "nuevo Auswitch"

martes, junio 13, 2006

Guantánamo, el Auswitch del nuevo milenio

Aquí me estoy muriendo poco a poco, mental y físicamente. Y a todos nos está pasando lo mismo. Hemos sido ignorados, encerrados en medio del océano durante cuatro años. En lugar de someterme a más humillaciones [...] Prefiero morir tranquilamente por decisión propia [...]"

Extraído de una declaración escrita en 2005 por Shaker Aamer, ciudadano saudí residente en Reino Unido, a su abogado. Shaker Aamer fue detenido en Afganistán en enero de 2002 y de ahí fue trasladado a Guantánamo.

Más de cuatro años después de las primeras transferencias a Guantánamo, aproximadamente 500 hombres de unas 35 nacionalidades continúan encarcelados en este centro de detención de manera ilegal. Informes de los detenidos y sus abogados parecen indicar que muchos han sufrido torturas o malos tratos.


Más de media centuria después de los horrores nazis de los campos de concentración y otras aberraciones innumerables que no van a ser tratadas aquí, nos encontramos con horrores semejantes, en este mundo "post-moderno, democràtico y civilizado". Permítanme reírme. Guantánamo es la versión "agiornada" de los campos nazis de exterminio de Hitler, Goebels, Mengele, y otros tantos monstruos, que se han encarnado en la figura del presidente Bush y sus secuaces del crimen y el exterminio. El pasado domingo 11/6 nos enteramos que tres presos (dos sauditas y un yemení)de la carcel estadounidense de guantánamo (en territorio cubano)se "suicidaron". El genocida mayor del planeta, el pte. Bush, manifestó su honda preocupación por los hechos (¿será que está preocupado porque los suicidios fueron pocos?) y también destacó que "era importante tratar a los cadáveres de manera humana y con sensibilidad cultural". Estas declaraciones, a las que ya difícilmente se pueda adjetivar, pues hipocresía, sordidez, demencia asesina, impunidad absoluta, etc., etc., ya son calificativos que quedan cortos ante atrocidad tal. Es, según Bush, importante tratar a los cadáveres de forma humanitaria, por supuesto que no lo era antes de que fueran cadáveres. Las fotos que aquí se presentan son testimonios elocuentes de la forma "humanitaria" con que Estados Unidos trata a sus prisioneros (que ni siquiera son de guerra, pues hay una total falta de acato a las convención de Ginebra al respecto). Ciertos voceros talibanes declaran que estas no pudieron haberse suicidado, pues el suicidio no está "permitido por las leyes islámicas (también para los católicos, pero según sé, también se suicidan) y que sólo se les permite inmolarse en su guerra santa (Jidah). Este es también otro disparate incluido en un disparate mayor. Léase, si no, lo expresado en el comienzo de este escrito porel prisionero Shaker Aamer. Ayer, tres de los aliados incondicionales de Estados Unidos expresan sus dudas con respecto a estos "suicidios", y desde Riad hasta se habla de la posibilidad que hayan muerto en sesiones de tortura. ¡Qué disparate! A quién se le puede ocurrir que los estadounidenses, paladines de la democracia y de los derechos humanos en el mundo, torturen. Créanme que estas fotos de Guantánamo y las de la prisión iraquí de Abu Graihb, que han dado la vuelta al mundo, son trucadas. ¡Vaya idea peregrina! Ellos no saben torturar, sólo enseñan a torturar en la Escuela de las Américas. (Véase la argolla y el candado de la "sala de entrevistas" de Guantánamo, para que los "entrevistados se sientan cómodos, como en su casa.
Pero, no nos preocupemos, la ONU ya está advirtiendo a los Estados Unidos de su seria preocupación por este hecho y la situación y la existencia de Guantánamo. Y todos sabenos que cuando la ONU se planta en sus cabeles, ¿tiemble el mundo! Asì que a dormir tranquilos. ¿Será que habrá un antídoto, además de la denuncia y el hacer algo contra estos hechos, para soportar tanta hipocresía? No se le ve por ningún lado. El monstruo no parece tener saciedad a su apetito genocida y de exterminio. ¿Que este monstruo se parece a el nazismo de Hitler y sus campos de concentración? Vaya, ¿a quién se le ocurre? Estamos en el nuevo milenio, en un mundo civilizado, donde se respetan los derechos humanos, donde no hay lugar para la indefensión. La realidad es que en Guantánamo hay cerca de 500 prisioneros que hace casi 5 años que están allí sin una acusación formal, y sin un juicio por delante. ¿Cuál es la diferencia, me pregunto, entre eso, el suicidio, o esperar el crematorio o la cámara de gas? Mucha gente seguirá pensando que Guantánamo está lejos, en una isla aislada en medio del Caribe. Cuidado, Guantánamo, como Atenco, está a la vuelta de su casa.

La mujer es lo negro del mundo

Tal vez existan pocas expresiones con respecto a la condición actual (y de todos los tiempos) de la mujer como esta que describe John Lennon en su bellísima canción "La mujer es lo negro del mundo". Este tipo de violencia que nos cuenta y nos canta Lennon, tal vez no sea tan evidente como la brutal represión, vejación y humillaciones de todo tipo que padecieron las mujeres de San Salvador Atenco, pero existe. Y está presente allí donde muchos la quieren negar, ocultar, subestimar, o creer que "Yo no". Es la violencia diaria ejercida sobre las mujeres por toda clase de hombres (y también de mujeres, ¿por qué no?). Esa que no se nota tanto como la de Atenco, pero que hace un daño similar, por su cotidianeidad, por la costumbre, por la no resistencia, porque algunos creen que las mujeres están para lo que dice Lennon en su canción.

JOHN LENNON "Woman Is The Nigger Of The World"

Woman is the nigger of
the world (la mujer es lo negro del mundo)
Yes she is...(Sí lo es) think about it
(piénsalo) Woman is the nigger of
the world(La mujer es lo negro del mundo)
Think about it...(Piénsalo) do
something about it (Haz algo acerca de ello)

We make her paint her
face and dance (Le hacemos pintar su cara y bailar)
If she won't be slave (Si no es una esclava) ,we
say that she don't love us (decimos que no nos ama)
If she's real, (Si es real) we say she's
trying to be a man (decimos que está tratando de ser hombre)
While putting her down (en tanto que la menospreciamos) we
pretend that she is above us(fingimos que está por encima nuestro)
Woman is the nigger of
the world...yes she is (La mujer es lo negro del mundo, sí lo es)
If you don't belive me take a
look to the one you're with (Si no me crees, échale un vistazo a la que está contigo)
Woman is the slave of
the slaves(La mujer es la esclava de los esclavos)
Ah yeah...better scream
about it(Ah, sí... mejor grítalo)
We make her bear and raise
our children(Le hacemos criar y educar a nuestros hijos)
And then we leave her flat for(Y luego la dejamos plantada)
being a fat old mother hen(por ser una mamá gallina gorda y vieja)
We tell her home is the only
place she would be(le decimos que su único lugar es la casa)
Then we complain that she's(Y luego nos quejamos)
too unworldly to be our friend(de que es muy poco mundana para ser nuestra amiga)
Woman is the nigger of
the world...yes she is (La mujer es lo negro del mundo... sí lo es)
If you don't belive me take a
look to the one you're with(Si no me crees échale un vistazo a la que está contigo)
Woman is the slave of
the slaves(La mujer es la esclava de los esclavos)
Yeah.... think about it (Sí...piénsalo)

We insult her everyday on TV(la insultamos a diario en la TV)
And wonder why she has no(y nos preguntamos por qué no tiene)
guts or confidence(ni coraje ni confianza)
When she's young we kill her
will to be free(Cuando es joven matamos su deseo de ser libre)
While telling her not to be so(mientras le decimos que no sea tan lista)
smart we put her down for being so dumb(la humillamos por ser tan "muda")
Woman is the nigger of(La mujer es lo negro...)
the world...yes she is
If you don't belive me take a
look to the one you're with(Si no me crees, échale un vistazo a la que está contigo)
Woman is the slave of
the slaves(La mujer es la esclava de las esclavas)
Yes she is...if you belive me,
you better screem about it.(Sí lo es... si me crees, mejor grítalo)

Repeat: (Repitan:)
We make her paint her
face and dance(Le hacemos pintar su cara y bailar)
We make her paint her
face and dance(Le hacemos pintar su cara y bailar) We make her paint her
face and dance(Le hacemos pintar su cara y bailar)

Seguiremos hablando de ellas, pero por lo pronto cambiémosle un poco la letra a la canción, sólo incluyámonos y pluralicemos: "La mujer es lo negro del mundo, pensémoslo, y si así lo creemos, hagamos algo sobre ello".

domingo, junio 11, 2006

Atenco: sólo una pequeña muestra gráfica



Tan sólo un par de fotos de la represión "oficial" en Atenco

San Salvador Atenco: barbarie e impunidad

Parece increíble que en los tiempos que vivimos ocurran sucesos como los acaecidos durante los primeros días de mayo pasado en San Salvador Atenco, Estado de México; sin embargo sucedieron. Muchas cosas parecen inexplicables, sobre todo en un país que se jacta de vivir en democracia y, risueñamente, preside desde hace pocos días la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Los hechos son bien conocidos a nivel mundial para mucha gente, y quienes no los conozcan, investíguenlos, pues la ignorancia y el olvido son siempre agentes etiológicos de la recidiva o la repetición. El caso es que una población entera fue salvajemente reprimida, en una operación paramilitar, tal como su comandante Robledo concede, y no sólo reprimida, sino que sus casas fueron allanadas y destrozadas, sus mujeres golpeadas, violadas, torturadas física y psicológicamente. Los padres molidos a golpes y puntapiés, los extranjeros presentes (que documentaban los hechos) fueron deportados sin más ni más. Los paseantes y los curiosos, igual. Acaba de morir un estudiante de la UNAM, víctima de una bomba de gas lacrimógeno que le destrozó el cráneo. En fin, la lista de atrocidades cometidas por este Gobierno que se dice democrático y de Derecho son innumerables. Esto podría tomarse como una crítica al partido en el Poder, si no fuera porque en esta situación confluyó la complicidad de los tres partidos políticos mayoritarios en México: el PAN (desde el gobierno federal), el PRI (desde el estatal), y el PRD (desde el local o municipal). Los tres se disputan en estos momentos el sillón presidencial para hacer un México justo, unido y humano. Los políticos negaron, ocultaron, y trataron de silenciar todos estos hechos, y muchos más. Pero es también de destacar que el papel de los medios masivos de comunicación trataron de disfrazar estos hechos adjudicándoselos a los pobladores de Atenco, con el nefasto antecedente de que ya se habían puesto violentos en otros momentos. Es decir, cuando con machetes y resistencia activa evitaron que se los despojara de sus predios y parcelas, con una indemnización ridícula, para construir un nuevo aeropuerto para la Ciudad de México. Se les estropeó el negocio a muchos allí, pero la vendetta no tardaría en llegar. El poder sí que no olvida, ni perdona. También se acusó al Subcomandante Marcos de ser instigador de esta violencia; por supuesto que para el Poder luchar por la dignidad es subversivo y violento. La Iglesia también calló en esta oportunidad, ¿qué raro, no? Los intelectuales (sólo algunos) mostraron su preocupación. Tal vez este hecho los pudiera distraer de sus presentaciones o comentarios de libros o de la asistencia a los magnos eventos oficiales que luego critican. Las organizaciones defensoras de los derechos humanos y casi toda la gama de ONG presentes en México y en el extranjero se desgarraron las vestiduras ante tal atroz hecho. Sería interesante averiguar cuántas de ellas son financiadas por el Poder y cuántas trabajan desde él. Pero están ahí, para que podamos dormir tranquilos y que estas cosas no sucedan, porque nuestros derechos humanos están protegidos por señores y señoras gordas que realmente se desviven por nosotros. El Sr. Robledo dice haber aplicado la prueba del polígrafo a muchos de los acusados de estas barbaries, y declara que ante su negativa de los hechos, el citado aparatito los respaldó. No se comprende la falacia del uso del polígrafo en estas circunstancias, cuando es ampliamente conocido que para la justicia no constituye ningún elemento probatorio. En cambio, la enormidad de pruebas y testimonios, que podría llenar carretillas, y que comprueban los terribles hechos acaecidos carecen para el Gobierno de toda veracidad. El operativo se llevó a cabo para proteger el orden público, combatir la violencia injustificada de unos pocos violentos que no desean la paz ni la democracia, y restaurar la “normalidad”. ¿Cuál será esa normalidad? ¿La del avasallamiento cotidiano de los derechos?
Frente a estos sucesos, sería injusto no destacar la movilización popular de una buena parte de la sociedad civil, nacional e internacional, (no dirigida por nada más que la indignación) para denunciar estos hechos y reclamar la libertad de quienes todavía se encuentran en prisión (¿por “revoltosos”?).
Pero, bueno, estamos en el Mundial de fútbol y hay que olvidarse de Atenco por ahora. Yo les pido que no. Olvidarse es quedar expuesto a que las cosas se repitan. Coméntenle lo de Atenco a sus hijos, a sus padres, a sus alumnos, a sus empleados, a sus clientes, a sus vendedores, a todos los que puedan. Ayer les pasó a ellos, hoy o mañana les puede pasar a sus madres, hijos, hermanas, novias, esposas, como a todas esas mujeres que fueron “tomadas como botín de guerra”. Algunos pensarán que Atenco está muy lejos, En esta peligrosa era de las globalizaciones, Atenco está tan cerca como comprar un despertador chino o un paraguas taiwanés. ¡Cuidado! El Mundial de fútbol nos prende a todos, para los gobiernos mundiales es especialmente una buena cortina de humo para que la gente se olvide de lo jodida que está y como se jode a los demás. Para muchos, el Mundial debería ser eterno. Prestémosle al Mundial 90 minutos de atención, pero luego pongamos nuestros ojos y oídos en otras cosas. Pensemos de qué nos gustaría ser campeones.

sábado, junio 10, 2006

Los chicos se divierten


Hoy, tal como prometí, voy a seguir hablando del Mundial de fútbol, pero se me ocurrió que algo que escribí hace tiempo, y raramente guardé, conserva bastante actualidad. Se relaciona mucho con el fútbol, especialmente en este magno evento, con cuestiones políticas, patrioteras, con la "guerra", y hasta con la vida y la muerte. ¿Por qué mezclar al fútbol, que debe ser en esencia alegría, con estos términos nefastos? Hoy que la guerra es soterradamente "Mundial", deberíamos preocuparnos porque el fútbol no se mezcle en ese cambalache discepoliano del nuevo milenio con la intolerancia, el racismo, el patrioterismo, el fanatismo, y muchísimo menos con la guerra, la vida y la muerte. Bueno, ahí les va:


Leo en el periódico de ayer, no sin cierta pesadumbre y quizás estupor, las declaraciones de un integrante del seleccionado mexicano de fútbol; joven él, creo que en mitad de sus veintes, preocupado por demás ante la proximidad de un partido que definirá quién viaja al Mundial de Fútbol de Japón-Corea del año entrante, y quién se queda en casa viéndolo por TV, si es que puede pagar el servicio de cable por evento. El 11 de noviembre, México se enfrentará en el Estadio Azteca de la Ciudad de México con el seleccionado de Honduras.
Ante la pregunta de la reportera de si “...están concientes de todo lo que está en juego junto con la clasificación de México al Mundial...”, este correcto y tesonero jugador responde: “Por supuesto que pensamos en eso. Se perdería muchísimo en todos los aspectos, lo tenemos claro y sabemos que si no clasificamos, muchos de nosotros quedaremos marginados, en el camino y con nuestras carreras frustradas”.
Me pregunto cómo es posible que un futbolista tan joven y talentoso piense que un partido de fútbol vaya a decidir tantas cosas sobre su futuro. Y realmente no lo culpo, en absoluto. Lo que él piensa no es casualidad o algo muy personal, es simplemente el resultado de presiones incontenibles que provienen desde un amplísimo espectro: millones de dólares en danza por publicidad, derechos comerciales, consumo de todo tipo de productos, estrellas que nacen, glorias pasadas que mueren; la mafia de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), que decide de manera omnipotente sobre los destinos de miles de futbolistas; y hasta los políticos, que saben que un triunfo deportivo puede redituar fecundos beneficios en otros campos, recuerden si no el Mundial de Argentina de 1978, con tanta gente humilde e inocente festejando, mientras la dictadura militar asesinaba tanta otra gente también inocente.
Y hablando de Argentina, muchos nos preguntan por qué queremos tanto a Maradona, si es un “drogón”, un “coco”, soberbio y “naco” a la vez, un hablador. La mayoría de los argentinos contestaríamos que, entre muchas otras cosas, fue el único, o casi el único, si consideramos al enormísimo comediante Alberto “Rucucu” “Piluso” Olmedo, que nos dio alegría en los últimos 30 años.
No habíamos hablado aún de la palabra alegría, pero viene siendo hora de que consideremos que el fútbol, el deporte más popular del mundo, es alegría. Recuerdo cuando, vistiendo la camiseta del Club Atlético Laprida, en Lanús, que era además la primera casaca “oficial” que lucía, me expulsaron de un partido. Había dado una violenta patada a un habilidoso contrario, rival de barrio, oponente, casi “enemigo”. Ernesto, nuestro entrenador, un hombre tan simple como magnífico, me encaró en el vestuario vacío: “¿Qué hacés, vos sos loco? ¿Viste el patadón que le pegaste? ¿Qué sos, un asesino, sos? Tal vez esa era la estrategia de Ernesto para conmover, pero la palabra “asesino” me sonó muy fuerte. Posiblemente, él y yo la necesitábamos. “Acá se viene para divertirse”, continuó, “Si no venís a divertirte, no vengás más”. Por suerte seguí yendo. Recuerdo también que siempre se cita como algo poco frecuente la frase de un exitoso entrenador de fútbol que les alcanzaba la pelota a sus dirigidos diciéndoles: “Vamos muchachos, salgan a la cancha y diviértanse”.
Volviendo al jugador mexicano de fútbol que acapara nuestra atención en este momento, dice en otro pasaje de la entrevista: “Este 11 de noviembre nos jugamos el partido más importante de nuestras vidas, posiblemente nos afectaría el bolsillo y en todos los aspectos”. Nunca fui jugador profesional de fútbol, jamás recibí un centavo de nadie, tal vez porque no tuve el talento para destacar y trascender, pero sí recuerdo el sandwich y la coca que recibíamos cuando el Club Laprida jugaba de visitante. Ese “pago”, pues era independiente del triunfo o la derrota, nos sabía a gloria luego del partido, más si habíamos ganado; pero, incluso con una goleada a cuestas, nos habíamos divertido. Comiendo un “especial” de jamón y queso y bebiendo nuestra coca, un puñado de chiquillos de 10 años nos habíamos divertido, teníamos alegría. Nunca hubiera pensado que un partido iba a ser el más importante de mi vida, siempre el más importante estaba por llegar.
En encuentros claves de fútbol, que ya son tantos que no se sabe cuál es más clave que el otro, de los dos o hasta tres por semana que les imponen a los jugadores, se escuchan a menudo frases como éstas: “Es nuestra última oportunidad”, “Va a ser a todo o nada”, “Es a matar o morir”, y hasta se llega a decir “Va a ser una guerra”. Qué lamentable y cuán doloroso es escuchar esa temible, vapuleada y manoseada palabra con referencia al fútbol. ¡Qué confundido me siento! Yo que creía que la guerra era desolación, tristeza, muerte, y el fútbol, alegría, divertimento, vida! ¡Queremos alegría, no una guerra!
No obstante está confusión tan hábilmente planeada, el Comité de la FIFA organizador del próximo Mundial asegura que “...la competencia se realizará conforme a lo previsto...pese a las acciones bélicas de los Estados Unidos en Afganistán”. Los negocios son los negocios, y la guerra es la guerra, ¿o no eran lo mismo? El “pan o los cañones” de Mussolini, el “pan y el circo” de hasta hace poco, sólo “el circo” en estos días, discúlpenos pero el “pan” lo suspendemos por ahora, es que estamos en guerra. Tendremos dos guerras, entonces. Una “guerra por la ‘humanidad’”, en Medio Oriente y una “guerra deportiva”, en el Lejano Oriente. Muchos analistas y empresarios estarán pensando en lo inconveniente de una superposición de ratings.
De lo que atañe a los políticos, poco hablaremos, aunque resulta por cierto preocupante que el presidente mexicano opine que “sería terrible (sic) para México no asistir al Mundial de Japón-Corea del 2002”. Parece, en cambio, que no le parece tan terrible que México participe en la “otra” guerra. Tampoco nos vamos a abocar a Dios, ¡válgame el mismo!, no es de ninguna forma el tema que nos ocupa; pero, parece que muchos le han adjudicado posturas y predilecciones en ambas “guerras”. No resulta extraño hoy en día escuchar “Ganaremos porque Dios está de nuestro lado”. ¡Qué Dios tan omnipresente y ambivalente! ¿O será que la variedad de dioses se refleja en la diversidad de los resultados?
Después de ver las lacerantes imágenes de los niños afganos en un éxodo quién sabe a dónde, de tener conciencia de los miles que mueren de hambre en Irán debido a un absurdo embargo que llevan adelante los sempiternos “defensores” de la democracia y la libertad, de los niños brasileños torturados o masacrados por los “escuadrones de la muerte”, de los chicos de la calle del mundo entero, parece que la sorna fascista, racista y reaccionaria que predica, ¿en broma?, que “hay que matarlos de chiquitos”, no fuera tan en broma. Esos chicos no se divierten aunque creamos que lo están haciendo. Para ellos, ni siquiera una pizca de futuro, ya ni hablemos de alegría. “¿Alegría de qué?”, nos preguntarían.
Permítaseme ahora volver a remontarme al pasado, como buen nostálgico que soy, y recordar esos momentos de alegría que nos daba el fútbol a los “pibes”. Estábamos un día reunidos en un recreo de la escuela primaria, los eternos niños amantes del fútbol, discutiendo acerca de qué nombre ponerle al equipo de balompié de nuestro curso. Las propuestas eran variadísimas y todas muy dignas de ser consideradas. Finalmente, les debo decir, no sin un cierto dejo, ahora, de culpabilidad que, luego de una votación donde los papelitos mostraron una mayoría absoluta, le pusimos “Los chicos se divierten”.-

viernes, junio 09, 2006

Esto sí que es Mundial


Mucha suerte a México en su primer partido contra Irán, aquí les va una caricatura de otro negro (éste sí talentoso y famoso), el Negro Roberto Fontanarosa. Habrá más cosas sobre el Mundial en estos días, no todas serán graciosas.

jueves, junio 08, 2006

¿Debates o culebrones?

De lo que hay no falta nada: junio 2006

Están de moda los debates políticos. Junto con las encuestas, tarde o temprano le tocan a culaquier persona que no viva en una cueva (con domicilio cavernario desconocido, pues si no lo van a encuestar). Lo curioso es que se parecen cada vez más a los "reality shows", las soap operas, los culebrones, las telenovelas o como ustedes quieran llamarles; pero si bien guardan una similitud en la forma, en el fondo estos géneros entretienen a la gente, Los debates aburren, y además molestan y entristecen. Aburren porque sólo hablan del pasado, nunca se atreven a echar un vistazo al futuro, nos exponen a acusaciones mútuas, descalificaciones, chismes de baja estofa. Molestan, porque uno espera escuchar otras cosas, se siente defraudado. Finalmente, entristecen; y lo hacen porque tumban esperanzas, muestran algo de lo que se verá en nuestras vidas en el futuro. Es como la anticipación de un final aciago y amargo de telenovela.
Aunque pensándolo bien, rescato a las telenovelas, en ellas han trabajado buenos actores y actrices, mucha gente ha hecho suyas esas historias, y tal vez acompañaron muchas tardes de soledad y costura o desamor. Pero no consigo rescatar a los debates. Les propongo un ejercicio: Vean un debate político, o si quieren grábenlo, luego reprodúzcanlo, pero en ambos casos quítenle el audio a la TV. Vaya sorpresa que se van a llevar: todos los de-batidores (sic) presentan gestos, ademanes y posturas (además de su esmeradamente cuidadados vestimenta y maquillaje) que han sido trabajados por sus "cuidadores de imagen" -¿Dónde se estudiará esta lucrativa profesión?-, todo al servicio de sus propuestas, por supuesto. Pero la verdad es que nos dan todo el aspecto de querernos vender algo que no es lo que queremos "comprar", no nos engañan. Sus falsas "actuaciones" de un mal método stalinslavskiano no convencen, el peor actor o actriz de telenovela tendría seguramente una actuación muy superior que la de estos señores... y señoras, que éste no es asunto para ponerse machista, ¡joder!

Ya estamos como estamos de las encuestas

Creo que no podemos ser tan tontos como para dejarnos engañar por las encuestas; fundamentalmente porque no somos ni números ni porcentajes, somos seres humanos. Y eso es lo que debemos recordar a sol y a sombra. Por supuesto que los intereses que pretenden numerarnos, "porcentajearnos", vendernos (como objetos o como potenciales consumidores), o sea vendernos desde sus cargos (jefes, políticos, en fin, todos aquellos que en algún momento detentar cierto poder sobre nosotros) o vendernos algo para transformarnos de números en encuestas y porcentajes en números en sus cuentas bancarias. Son esas cuentas las que pagan las encuestas, esas que nos enrostran a cada rato y por todas partes. Entonces creen que pensamos que hay que votar a fulano o a zutano, o hay que tomar esto y comer aquéllo, y tolerar aquí e intransigir allá. Que hay que hacerlo porque las encuestan lo dicen, y este refresco refresca (perdón por la necesaria redundancia) remejor (para que quede ya superredundante). Las encuestas son serias, son confiables, son creíbles. Las hacen compañías serias, pagadas por gente seria, ¡joder! No cabría entonces preguntarse, ¿por qué difieren tanto? ¿por qué esas compañía tan serias hasta declaran para quien trabajan? Aquí no vale eso de que nadie sabe para quién trabaja, y si no es así, pues ya no trabajas. Pero lo que finalmente ignoran las encuestas, y quien las hace, es que los números no piensan y la gente sí, y que la gente es tan sabía como para aún reirse de ese dicho que de estar pintado en tantos baños públicos de todo el mundo se ha convertido en un clásico internacional: "Coma mierda, miles de millones de moscas no se pueden equivocar".